México
y su educación
La
palabra educación, etimológicamente proviene de la raíz educare, que significa conducir, guiar
u orientar. De la educación han
hablado infinidad de autores y entre los
más importantes encontramos a Platón quien señala que educar es dar al cuerpo y al alma toda la
belleza y perfección de que son capaces. Y explica este concepto, a través de
la alegoría de la caverna, la cual habla de un espacio cavernoso, donde se encuentran
un grupo de hombres prisioneros desde su nacimiento por cadenas que les sujetan
el cuello y las piernas de forma que únicamente pueden mirar hacia la pared del
fondo de la caverna sin poder nunca girar la cabeza. Justo detrás de ellos, se
encuentra un muro con un pasillo y, seguidamente y por orden de cercanía
respecto de los hombres, una hoguera y la entrada de la cueva que da al
exterior.
Por el
pasillo del muro, circulan hombres portando todo tipo de objetos cuyas sombras,
gracias a la iluminación de la hoguera, se proyectan en la pared que los
prisioneros pueden ver. Estos hombres encadenados, consideran como verdad las
sombras de los objetos. Debido a las circunstancias de su prisión se hallan
condenados a tomar únicamente por ciertas todas y cada una de las sombras
proyectadas ya que no pueden conocer nada de lo que acontece a sus espaldas.
Posteriormente hace referencia a lo que ocurriría si uno de estos hombres fuese liberado y obligado a
volverse hacia la luz de la hoguera, contemplando, de este modo, una nueva
realidad. Una realidad más profunda y completa ya que ésta es causa y
fundamento de la primera que está compuesta sólo de apariencias sensibles. La
alegoría acaba al hacer entrar, de nuevo, al prisionero al interior de la
caverna para "liberar" a sus antiguos compañeros de cadenas, lo que
haría que éstos se rieran de él. El motivo de la burla sería afirmar que sus
ojos se han estropeado al verse ahora cegado por el paso de la claridad del Sol
a la oscuridad de la cueva. Cuando este prisionero intenta desatar y hacer
subir a sus antiguos compañeros hacia la luz, Platón nos dice que éstos son
capaces de matarlo y que efectivamente lo harán cuando tengan la oportunidad.
A través de este relato Platón, refiere que la educación es un proceso a
través del cual, el ser humano es
consciente de la existencia de otra realidad, que no conocía por estar inmerso en la
obscuridad de la ignorancia. Pero esta toma de conciencia, nos dice que puede
ser dolorosa, porque no es fácil eliminar los dogmas adquiridos con el paso del
tiempo y considero que lo más complicado, es ayudar a los demás seres a
transitar de la obscuridad a la luz cegadora del conocimiento.
Por su parte Aristóteles nos dice que la educación consiste en dirigir los sentimientos de
placer y dolor hacia el orden ético, por lo tanto lo que se busca a través de
este proceso, es el perfeccionamiento
del ser humano, con el objetivo de alcanzar su bienestar, como fin último.
Mientras que Juan Jacob Rosseau, nos habla de
una educación para la libertad, ello implica que una vez que el ser humano
logre dominar sus pasiones y apetitos que lo esclavizan alcanzara la libertad y
ello dará como consecuencia una sociedad integrada por ciudadanos libres, que
participan y deliberan sobre la organización de la comunidad y los asuntos
públicos.
Y así podríamos continuar citando autores que
se han preocupado por eso llamado educación, pero considero que las ideas anteriores nos proporcionan un panorama
bastante amplio con el que se puede trabajar. Partiendo de las definiciones
anteriores, podemos ya hacer referencia a lo que establece nuestra legislación
nacional, partiendo desde la Constitución Política, la cual en su artículo
tercero nos señala que todos tienen derecho a la educación y que a través de ella se pretende desarrollar
todas las facultades del ser humano, pero en ningún momento nos determina que
debemos entender por educación, por ello debemos acudir a la legislación secundaria,
denominada Ley General de Educación, quien en su artículo 2º nos dice que la educación es medio fundamental
para adquirir, transmitir y acrecentar la cultura. Y es un proceso permanente
que contribuye al desarrollo del individuo y a la transformación de la
sociedad, y es factor determinante para la adquisición de conocimientos y para
formar a mujeres y a hombres, de manera que tengan sentido de solidaridad
social. Como podemos observar esta breve definición abarca elementos generales
de las definiciones dadas por los autores citados en líneas anteriores y
podemos señalar entonces que a través de la educación el individuo desarrolla
todas sus facultades, para conocer una nueva realidad y así mejorar su entorno.
Pero las los conceptos señalados en párrafos
anteriores, no son suficientes para
abarcar la problemática por la que atraviesa la educación a últimas fechas en
nuestro país. Por ello es imprescindible hacer referencia al Plan Nacional de
Desarrollo, el cual nos señala que aun existen grandes retos por cumplir en el
ámbito educativo, que si bien es cierto cada vez es menor el rezago que se vive
en nuestro país, respecto a la educación básica, también es que otros son los
problemas que han surgido en este ámbito, como la desigualdad que se presenta
entre los planteles escolares, la falta de oportunidades y considero yo la
desvinculación que existe entre el ámbito educativo y el laboral. Y es ahí
donde me gustaría insertar la educación superior, respecto a este punto, el plan nacional de desarrollo nos señala, que solo uno de cuatro jóvenes ingresa a la universidad, los factores son
infinitos, incluidos la situación económica y creo el más alarmante, es el que se funda en la creencia de que no
existe garantía entre la preparación y la obtención de un trabajo bien
remunerado al terminar la universidad. Por lo tanto vemos que a partir de estas ideas
tenemos dos elementos que desafortunadamente se ven conjugados, uno es LA FALTA
DE PREPARACION EDUCATIVA Y EL DESEMPLEO EN NUESTRO PAIS, ambos pueden ser causa
y consecuencia de manera indistinta. Y es así, como se llega a ese círculo, que muy
difícilmente es posible romperse.
Otro punto que considero importante resaltar, respecto a la educación
superior en nuestro país, es que la mayor parte de los que ingresan eligen
carreras enfocadas al área social y administrativa, dejando de lado las
ciencias agropecuarias, naturales y exactas y al cuestionarse tal
comportamiento, encontramos que la razón es muy sencilla y se funda en el poco
apoyo que nuestro país a la ciencia, ya que
estudios realizados por la organización para la cooperación del
desarrollo económico, México solo destina el 0.44% del PIB al rubro de la
ciencia tecnología e investigación, mientras que países desarrollados y
considerados como fuertes potencias destinan más del 2% de su PIB. Estos
resultados no concuerdan con algunos informes que el Presidente de la Republica
se jacta en discurrir en público, señalando que para el 2010 se ha incrementado
aproximadamente un 80% en comparación con el 2006, el presupuesto para la
investigación y la ciencia, lo cual aunque realmente sea cierto, no es suficiente, ya que de acuerdo a
diversos estudios realizados por prestigiadas universidades, México tiene
cuando menos un rezago de ciencia y tecnología de diez o veinte años. Todo lo
anterior, ocasiona que de cada diez que
ingresan a la universidad solo dos elijan estudiar una carrera encaminada a las ciencias
exactas a raíz del nulo apoyo que existe en nuestro país para aquellos que optan por tal área del
conocimiento. Generándose, en aquellos
dos individuos que a pesar de todos los elementos en contra deciden adentrarse
a esa dura aventura, un fenómeno llamado “fuga de cerebros”.
Con base en lo anterior tenemos que la educación en nuestro país aun se
encuentra en un nivel muy por debajo de los países desarrollados y que día con
día nos vamos alejando mas de ese ideal de educación, ya que puede que las
cifras nos digan que la situación educativa en nuestro país mejora, pero la realidad es
apabullante, al notar que la tasa de
deserción es inmensa en todos los niveles educativos y que dentro de las
razones más comunes es la grave
situación económica que se atraviesa en nuestro país y que redunda en el
desempleo o en el empleo mal remunerado. Y otra muy importante, es la incapacidad del Estado mexicano de
ofrecer trabajo a aquellos egresados de las universidades, lo que cada día se
hace más evidente y ocasiona que se pierda el amor por la educación y la
preparación, viendo solo a las mismas como un medio de obtención de
satisfactores materiales.